En mi último escrito hablaba de oficios y profesiones de antaño y anuncié otro sobre nuevas profesiones. Esto es más peliagudo porque si un capador era uno que capaba animales, un editor de contenidos no es fácil de explicar. Ya la palabra contenido es vaga y difusa en este caso. "El que organiza facilita la lectura coherente de un contenido multimedia, cuida los formatos de estilo, corrige la ortografía, puntuación, a la par que revisa el vocabulario..." (Universidad de Barcelona.) Sin saberlo, yo soy content editor ya que hago todo eso y mucho más en mis artículos, en mi Blog y en mis libros. (Y yo sin saberlo.) Otra profesión: Gestor cultural. UNIR, La universidad en Internet me cuenta que es "una profesión emergente" y su función es "acercar la cultura a la sociedad." Tiene que hacer propuestas culturales, elaborar presupuestos, negociar con entes públicos, dirigir equipos de trabajo, y planificar eventos. Total: un camelo. Ni el Editor de contenidos, ni el gestor cultural necesitan una formación universitaria específica, ni necesitan tener cultura alguna ni saber redactar un artículo. Hay más, pero todas estas nuevas profesiones "camelo" me aburren y demuestran dónde hemos ido a parar.
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